Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Revista SIC-antiguo

Es actualmente una publicación mensual que desde la Fundación Centro Gumilla se ha dedicado al análisis político, social, económico y cultural del acontecer nacional. Con más de 830 números publicados, la Revista SIC se ha convertido en el referente histórico por excelencia, que por más de 83 años ha orientado la opinión pública desde la perspectiva de los sectores más vulnerables de la sociedad venezolana y latinoamericana.

Nuestra amplia trayectoria ha permitido a nuestros lectores de manera ininterrumpida acceder a un producto de calidad, que aglutina la opinión de reconocidos expertos en el área. Esta dinámica ha sido reconocida por distintos sectores de la sociedad que a lo largo de los años le han otorgado a la Revista SIC un espíritu de credibilidad indiscutible.

Hoy por hoy, la Revista SIC es un reflejo tangible de la memoria histórica de Venezuela, que apuesta por la reconstrucción del tejido social, el fomento de la cultura democrática y la generación de espacios alternativos e incluyentes, propicios para el diálogo participativo.

Un añadido que suma y aporta valor a la trayectoria de la revista es que tiene disponible una biblioteca digital con los archivos históricos, desde la revista número 1, publicada en 1938. La Biblioteca Digital de la revista SIC es de acceso libre y puedes consultarla en la página web de la Fundación Centro Gumilla.

La revista SIC y sus artículos publicados durante nuestros 83 años de historia están disponibles en PDF y son de libre acceso.

 

Fundador e Historia

Un dato conmovedor de nuestra historia nos lleva a recordar que la Revista SIC nació en la Navidad de 1937, siendo su cuna el Seminario Interdiocesano de Caracas (SIC), además, uno de los referentes de las siglas que conforman su nombre “SIC”.

En aquellos años, las comunidades y obras jesuíticas tenían la buena costumbre de que hubiera alguien con la responsabilidad de llevar el diario de la casa. Tanto que en nuestros archivos se deja ver una breve referencia: Hoy nos han entregado a algunos seminaristas el primer número de nuestra revista SIC, dice el Diario del Seminario, en una nota del 25 de diciembre de 1937.

Así fue como la Revista SIC N° 01 de enero de 1938 estuvo lista desde la Navidad anterior, como decidido anticipo de la seriedad que iba a mostrar al no faltar a una sola de sus citas mensuales, lo cual hemos logrado cumplir al menos en sus primeros 80 años.

Por estos tiempos el padre de la criatura, Manuel Aguirre Elorriaga, había regresado de Roma, apenas tres meses antes, después de culminar su doctorado en Historia. El joven y brillante historiador había excitado las apetencias de la Universidad Javeriana de Bogotá y de los jesuitas de Chile, con mucho más poder que las por entonces muy débiles Iglesia y Compañía de Jesús en Venezuela. Pero Manuel –para entonces ya enamorado de Venezuela después de su experiencia de tres años (1926-1929) de “maestrillo” en el recién nacido Colegio San Ignacio– tenía muy claro que lo suyo era Venezuela.

Portada del primer número publicado.

Primer número de la Revista SIC

 

P. Manuel Aguirre Elorriaga, s.j.

“SIC”, además de sigla del Seminario Interdiocesano de Caracas, en latín significa “¡así es!”. Una afirmación de seguridad muy propia de la Iglesia de la Restauración, que se veía a sí misma con la seguridad de sentirse depositaria de la verdad de Dios en esos tiempos de confusión entre tantos “-ismos” como expresión de búsquedas filosóficas, sociales y políticas.

Fue así como Manuel Aguirre s.j, en su primer Editorial, deja plasmada esta expresión comoun “lema de optimismo y una afirmación de seguridad”, técnicamente indiscutible. La fundación de la revista respondía tanto al momento institucional de los jesuitas en Venezuela como al momento sociopolítico del país.

Los primeros jesuitas habían llegado 22 años antes, llamados para atender a la formación de los sacerdotes en el Seminario. Eran ya, para 1938, 121 los jesuitas en Venezuela que atendían, además, al Seminario Menor de Coro, a los Colegios San Ignacio (Caracas) y San José (Mérida) y a las Residencias San Francisco (Caracas) y San Felipe (Maracaibo). Y había otros 14 jóvenes jesuitas de Venezuela formándose en Europa… ¡Necesitaban ya un órgano de expresión y de diálogo con la sociedad!

Venezuela, por otra parte, a dos años de la muerte de Gómez, era un hervidero de búsquedas y posicionamientos. Los antiguos alumnos no se habían encerrado en piadosas capillas. Se habían incorporado al torbellino de la Federación de Estudiantes de Venezuela (FEV); pero, al no poder sumarse a la solicitud del movimiento estudiantil de la expulsión de los jesuitas de Venezuela, se habían constituido en Unión Nacional de Estudiantes (UNE, 1936), que diez años después se iban a llamar Partido Social Cristiano COPEI. En ese contexto, también Venezuela clamaba la palabra orientadora de los jesuitas.

El padre Manuel asumió la revista no precisamente como iniciativa de desempleado: daba clases a los seminaristas en cinco asignaturas claves (Historia Eclesiástica, Pastoral, Historia Patria, Historia de la Filosofía y Ciencias Sociales). Y, además de hacerse cargo de la Dirección de SIC, fundó la Escuela San Francisco Javier, anexa al Seminario y, sobre todo, inició el movimiento de los Círculos Obreros, de los que fueron naciendo los sindicatos de Codesa (llegaron a agrupar 5 federaciones con 60 sindicatos y 80 ligas campesinas); como necesidad del nuevo movimiento sindical, fundó también  el Instituto Nacional de Estudios Sociales INES (para la formación de militantes obreros) y FUDASC (Fraternal Unión de Dirigentes de Acción Social Católica, para la formación integral de sus dirigentes). Ese catolicismo social que él había promovido reforzó la autoridad de sus análisis y propuestas para Venezuela que presentaba en nuestra Revista SIC, pionera del análisis coyuntural de Venezuela.

Finalmente, valdrá la pena recordar por estos tiempos un extracto de aquel primer Editorial de la Revista SIC, que circulaba en el mes de enero de 1938, el cual, haciendo referencia a la Venezuela vejada por la dictadura, afirmaba:

“En este momento de crisis patria el silencio es cobardía; y la inacción, pecado”.

Equipo Revista SIC

Dirección: Juan Salvador Pérez

Jefatura de redacción: Marian Ortega

Coordinación de redacción: Marlene García

Diseño gráfico: Elena Carlota Roosen